La extensa obra del artista nacido en Andoain ha sido desconocida hasta hace pocos años y es ahora reconocida gracias a una investigación. La muestra se expondrá hasta el 25 de febrero
La sala de exposiciones de Bastero Kulturgunea acogerá del 27 de enero al 25 de febrero una exposición póstuma del artista nacido en Andoain, Imanol Bengoetxea. A través de esta muestra y por iniciativa propia de los familiares del creador, sale a la luz y se reconoce la personal y extensa obra de este artista, hasta ahora desconocido pero que personas expertas en arte y aficionados destacan como descubrimiento.
Imanol Bengoetxea ha sido un autor totalmente desconocido hasta el año 2020. Gracias a la investigación de la doctora en Arte Silvia D. Sábada, se ha recogido y estudiado la obra de Bengoetxea, que ha ido adquiriendo reconocimiento. Sus trabajos que ven ahora la luz y hasta ese momento se escondían en el sótano de la casa familiar en un pequeño pueblo navarro, destacan por su gran personalidad innovadora e inquieta, y van desde lo figurativo hasta lo expresionista, lo matérico y lo simbólico, según se desprende la investigación de esta especialista. Su producción es en mayor parte pictórica, pero también hay trabajos escultóricos o realizados en soportes de lo más variopinto, como botellas, macetas de barro o latas de pintura y tapas.
Manuel Bengoetxea Goikoetxea, Imanol, nació en Andoain en 1963 y fue el mayor de los seis hijos de una acomodada familia dedicada a la construcción. La vida artista se vio truncada al llegar una crisis y verse forzado a trasladarse a Barasoain con toda su familia, para comenzar allí de nuevo. Este giro radical, tanto en lo personal como en el nivel de vida, obligó al joven artista a renunciar sus aspiraciones artísticas, si bien mantuvo estas inquietudes, pero ya de manera autodidacta. De esta manera, el tiempo libre lo dedicaba a leer, pintar, modelar o diseñar muebles; actividad que en ningún momento transcendió las paredes de su casa.
Su producción fue extensa y volcó en ella todos sus miedos y su angustia vital, ahondando a medida que transcurrían los años en una compleja y rica simbología muy personal. La mayor parte de obra fue realizada a partir de los 18 años, una vez finalizado el servicio militar. Fue en esta etapa de más de una década, hasta que el artista pusiera fin a su vida, donde Bengoetxea alcanzó su estilo matérico y gestual, próximo a expresionismo y con un muy personal sentido del color.
Txitxu Ruiz, concejala de Educación y Cultura, ha acompañado a la familia Bengoetxea en la apertura de la exposición; han estado presentes hermanos y hermanas del artista: Iñaki, Ana Mari, Cosme, Mari Carmen y Edurne Bengoetxea. En palabras de Ruiz, el trabajo de Begonetxea “resulta de interés general, tanto por lo singular del caso, como el atractivo de una obra que no deja indiferente al espectador, que conecta con emociones y con la mente del artista nacido en Andoain, que mediante su obra expresaba sus inquietudes”. Se abrirá en el horario habitual (de lunes a viernes de 18:30 a 20:00). Sábados de 10:30 a 13:30 y de 18:00 a 20:30.