Ekhi, de niña, temía por mil razones, pero había dos cosas por encima de todas. Lo que le causaba un miedo terrible: ver a alguien desprotegido y a las brujas, las solitarias y malvadas mujeres que vivían en una vieja cabaña de una cima. Ekhi, por salvar la araña que amaba, fue superando muchos temores. Así nos lo cuenta la propia Ekhi, una anciana que con el paso de los años se ha convertido en una “bruja”.