Palmira y Jenaro, un matrimonio de jubilados, esperan la visita de su hijo
durante una memorable noche de insomnio. El hijo, un cooperante expatriado,
viene con la intención de llevárselos a vivir con él y así poder atenderlos como
merecen. Esta visita va a desencadenar en la pareja un conflicto en torno a la
defensa del propio espacio, y su sensación de inutilidad en esta sociedad del beneficio.